El neonato es el ser más sensible y perceptivo que existe. Pasa de estar en un ambiente de calidez, sin gravedad, flotando en líquido, sin tener que respirar,ni comer, ni excretar, a un ambiente con mucho ruido, con cambios de temperatura, con gravedad y realizando un enorme esfuerzo para respirar, ingerir, digerir, excretar, etc.Es a través de su cuerpo cómo entran todos los estímulos al sistema nervioso y será con su cuerpo con el que demuestre el estado de madurez de este sistema nervioso.

Su postura y su actitud motora nos van a dar muchas pistas de cómo se está desarrollando su cabecita por dentro.

En el neurodesarrollo es mejor que las cosas se hagan bien y no tener prisa por hacerlas. Entiende por qué es bueno que desde el primer día se les ponga en prono (despiertos) y a ratitos. Por qué es bueno que los padres no interfieran en exceso en su desarrollo y permitan al bebé desarrollarse solo y explorar a su manera. Por qué es bueno tocarles, moverles y portearles.

La mejor manera de entender el desarrollo sensoriomotor es poniéndote en el papel de nuestro pequeño protagonista en cada una de las etapas. Así, entenderás qué siente y por qué va logrando determinados hitos motores en cada momento.